Los Philadelphia Eagles demostraron su dominio absoluto en el juego terrestre al registrar siete touchdowns y 232 yardas por tierra, en una aplastante victoria de 55-23 sobre los Washington Commanders. Con este contundente triunfo, los Eagles no solo reafirmaron su poderío, sino que se coronaron campeones de la Conferencia Nacional (NFC) y aseguraron su lugar en el Super Bowl LIX, donde enfrentarán al ganador del duelo entre los Kansas City Chiefs y los Buffalo Bills.
Jalen Hurts hace historia en la postemporada
El mariscal de campo Jalen Hurts continúa escribiendo su nombre en los libros de historia de la NFL. Con tres anotaciones terrestres en este encuentro, alcanzó un total de nueve touchdowns por tierra en playoffs, superando la marca del legendario Steve Young y convirtiéndose en el mariscal de campo con más touchdowns terrestres en la historia de la postemporada.
Un inicio intenso, pero los Eagles tomaron el control
El partido comenzó con una ofensiva prometedora para los Commanders, quienes se adelantaron en el marcador con un gol de campo de Zane Gonzalez. Sin embargo, la respuesta de los Eagles fue inmediata y contundente. En su primer acarreo, Saquon Barkley explotó con una espectacular escapada de 60 yardas hasta las diagonales, estableciendo el tono para lo que sería un dominio absoluto de Philadelphia.
En la siguiente serie ofensiva, los Eagles continuaron con su ataque terrestre. Barkley volvió a ser protagonista, llevándose el ovoide en la zona roja y cruzando la línea de anotación para poner el marcador 14-3.
Los Commanders intentan reaccionar, pero Philadelphia no cede terreno
Washington intentó mantenerse en la pelea al conseguir otro gol de campo y posteriormente una anotación de Terry McLaurin, acercándose 14-12 en el marcador. No obstante, su intento de conversión de dos puntos no tuvo éxito.
Philadelphia aprovechó el momento y volvió a ampliar la ventaja con su ya emblemático "tush push", una jugada diseñada especialmente para Hurts en situaciones de corto yardaje. Poco después, los equipos especiales de los Eagles lograron recuperar el balón rápidamente, dándole a la ofensiva una nueva oportunidad. A.J. Brown no desaprovechó la ocasión y con una gran recepción en las diagonales puso el marcador 27-15 antes del descanso.
Hurts y Barkley sellan el pase al Super Bowl
En el tercer cuarto, ambos mariscales de campo lograron llevar el balón hasta la zona de anotación, pero la diferencia seguía favoreciendo a Philadelphia. Fue en el último cuarto donde los Eagles terminaron de sepultar las esperanzas de los Commanders.
Hurts y Barkley anotaron su tercer touchdown personal en el encuentro, dejando claro que el juego terrestre de los Eagles fue completamente imparable. Para poner la cereza en el pastel, Will Shipley sumó otra anotación más, asegurando el marcador final de 55-23 y certificando la presencia de Philadelphia en el Super Bowl LIX, que se disputará el próximo 9 de febrero en Nueva Orleans.
Con esta victoria, los Eagles llegan al Super Bowl como un equipo sólido y con un ataque terrestre arrollador, listos para enfrentar a quien surja vencedor entre los Chiefs y los Bills en la final de la AFC.