Tras el paso devastador del huracán Otis por Acapulco, que lamentablemente cobró la vida de 27 personas, los medios internacionales se han hecho eco de la tragedia debido a la magnitud de los acontecimientos.
La reconocida BBC del Reino Unido informó que este huracán, catalogado como de categorÃa 5, azotó el icónico destino turÃstico con vientos máximos sostenidos de 260 km/h y ráfagas de hasta 315 km/h, siendo uno de los huracanes más potentes registrados en la historia del PacÃfico mexicano.
Por su parte, la cadena estadounidense CNN destacó la asombrosa rapidez con la que este huracán se intensificó. En solo 24 horas, la velocidad máxima de sus vientos aumentó en 185 km/h, una hazaña que ha dejado atónitos a los meteorólogos. Solo un huracán previo, el Patricia en 2015, superó este nivel de rápida intensificación en los registros del PacÃfico Oriental, con un incremento de 193 km/h en 24 horas.
Según la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), se ha observado que más del 90% del calentamiento global de los últimos 50 años ha ocurrido en los océanos. Además, este año, el fenómeno de El Niño en el PacÃfico ha contribuido aún más al aumento de la temperatura del océano.
El diario español El PaÃs subrayó el escenario desolador en Acapulco, con hoteles y viviendas destruidos, vÃas de comunicación intransitables y miles de personas aisladas. Este huracán Otis representa la tormenta del PacÃfico más devastadora en tocar tierra en territorio mexicano en las últimas tres décadas.
Por otro lado, el periódico The New York Times señaló que, al principio, los pronósticos no anticipaban que esta tormenta tropical se convertirÃa en un huracán catastrófico. La mayorÃa de los modelos meteorológicos no preveÃan su intensificación en el océano PacÃfico, lo que llevó a los pronosticadores a subestimar su potencial destructivo. Sin embargo, su fortalecimiento fue rápido y tomó a todos por sorpresa, lo que llevó a las autoridades a advertir a los residentes sobre su peligrosidad.
La agencia de noticias Reuters informó que Otis inundó calles, arrancó techos de casas y hoteles, interrumpió las comunicaciones y bloqueó carreteras y accesos aéreos, dejando un rastro de devastación en Acapulco, una ciudad con casi 900,000 habitantes. Cuatro personas aún permanecen desaparecidas.
Finalmente, el diario británico The Guardian enfatizó que Otis cambió de categorÃa de tormenta tropical a huracán de categorÃa 5 en cuestión de horas, tomando por sorpresa tanto a los lugareños como a las autoridades. El Servicio Nacional de Huracanes de EE. UU. advirtió sobre un "escenario de pesadilla" el martes por la tarde.