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Melodía Martínez

Población Náhuatl, Tepehua y Otomí de la Sierra Nte. de Veracruz sin Protección Alguna ante Covid.



Ciudad de México.-La población Náhuatl, Tepehua y Otomí que habita en la Sierra Norte de Veracruz vive sin agua potable, sin acceso a servicios de salud, pues el Hospital Regional de Huayacocotla y las clínicas rurales del IMSS en la región carecen de insumos para atender a infectados por Covid-19, sobre todo ante la semana más agresiva de la pandemia que se dará entre el 6 y 10 de mayo, de acuerdo al subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell Ramírez.


Además de vivir en una zona de extrema pobreza, actualmente carecen de información en su lengua materna respecto a lo que significa la enfermedad de coronavirus.

Igualmente carecen de cubrebocas, gel antibacterial, sanitizantes y material de limpieza en todas las localidades rurales.


Bajo el argumento de proteger a la población de la enfermedad de coronavirus se instalaron retenes de policía en las entradas de la cabecera municipal de Huayacocotla, Veracruz, para impedir el acceso a personas foráneas. Es por ello, que Alberto Galindo García, miembro de la Comisión Ejecutiva Nacional de la CNPA MN y a nombre de la Unión Campesina Zapatista, organización integrante de la Coordinadora, dio a conocer el pliego petitorio de estas comunidades indígenas resumido en 10 puntos a fin de evitar contagios y muertes sin control en la Sierra Norte de Veracruz, zona de extrema pobreza.


Por lo anterior, demandó como prioritario: brindar información clara y precisa a la población en sus lenguas maternas: náhuatl, tepehua y otomí respecto a lo que significa la enfermedad de coronavirus.


Asimismo, dijo, que las autoridades municipales actúen en estricta coordinación con personal de salud estatal y federal para brindar información, la realización de pruebas de diagnóstico para detectar oportunamente posibles casos de contagio viral.


Lo también urgente, es dotar de material de salud e infraestructura hospitalaria al Hospital Regional de Huayacocotla y a las clínicas rurales del IMSS en la región así como la entrega de cubrebocas, gel antibacterial, sanitizantes y material de limpieza en todas las localidades rurales y barrios sin costo para sus habitantes.


Otra prioridad es el garantizar agua potable para todas las localidades y barrios pues de nada sirve la recomendación: “lávate las manos continuamente con agua y jabón” si se carece o se limita el vital líquido.


La realización de obra pública en localidades rurales, sobre todo agua potable, clínicas, casas de salud, caminos rurales y telecomunicaciones son un reclamo de años que aún carecen de atención por parte de las autoridades a pesar de existir compromisos presidenciales respecto a obra pública, infraestructura en salud y comunicaciones.


Por lo anterior, la Unión Campesina Zapatista (UCZ – CNPA MN), con presencia en Sierra Norte del estado de Veracruz exige el reconocimiento oficial y público al pueblo de Huayacocotla como Comunidad Indígena, respeto al derecho de identidad y autoadscripción como pueblos indígenas para avanzar en el mejoramiento de sus condiciones de vida.


Desde hace días, se han instalado retenes de policía en las entradas de la cabecera municipal de Huayacocotla, Veracruz, para impedir el acceso a personas foráneas bajo el argumento de proteger a la población de la enfermedad de coronavirus. Sin embargo, tales acciones son erráticas y violentan derechos como la libertad de tránsito de todo ciudadano mexicano dado que la policía municipal y estatal que le acompaña no tiene conocimiento en asuntos de salud; su actividad y actitud es restrictiva e impositiva. Se percibe la falta de coordinación con autoridades de salud estatal y federal.


En tanto, la Clínica Rural del IMSS ubicada en Texcatepec, Veracruz tampoco cuenta con la capacidad de atender a personas con enfermedades graves. Ambos nosocomios no han sido dotados de materiales y medicamentos comunes, mucho menos para atender enfermedades desconocidas como la pandemia del COVID-19, tema que junto con otros más han sido reclamos de la población desde hace varios años, incluyendo las recientes visitas del Gobernador del Estado y el Presidente de la República el pasado febrero donde se comprometieron públicamente a atender la problemática “pero no han cumplido”.


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