· Se instala la primera de seis águilas de bronce, que pesan 110 kilos cada una.
· Es la primera réplica del Altar a la Patria en el país, convirtiéndolo en un punto turístico de la ciudad.
Luego de que se anunciara que la réplica del Monumento a los Niños Héroes que se construye en Torreón en la Plazas de la Tortuga y que registra un avance de obra del 90 por ciento, convertirá a la ciudad en un punto turístico al ser la única ciudad del país en contar con una réplica al Altar de la Patria.
Este lunes inició la colocación de la primera de seis águilas que se colocarán en las columnas de mármol blanco, que conforman el monumento a los Niños Héroes en la ciudad de Torreón.
“En dos días más, colocaremos otras dos águilas, de tal manera que para el viernes quedan ya instaladas todas, para estar en posibilidades reales de invitar a los miembros del Ejército, es importante que las autoridades militares den su aprobación y vean el seguimiento en este tipo de obras, ya que los involucra de forma directa”, manifestó Antonio Loera López, director de Mantenimiento Urbano.
Las águilas son de bronce y pesan 110 kilos, se revestirán de una pátina café que prolongará la vida de las esculturas.
La comunidad artística lagunera agradece a la Administración Municipal, la confianza y la oportunidad de que gente de aquí realice el trabajo artístico que perdurará en el tiempo, por muchas décadas.
El escultor principal de estas piezas artísticas, Álvaro Castaño Orozco expresó: “Es un compromiso muy fuerte, porque será un monumento representativo y hemos puesto nuestro sello propio y haciendo nuestro mejor trabajo posible”.
Cabe mencionar que participaron más de 20 artistas, 10 laguneros y 10 de la Ciudad de México en el proceso de elaboración de estas águilas de bronce, su trabajo artístico perdurará en el tiempo y dará testimonio de la calidad de los artistas laguneros.
“Las águilas son de bronce vaciadas a la cera perdida, es un proceso que tiene 500 años haciéndose de la misma manera. El proceso es a la cera perdida, primero la figura se hace en plastilina, se saca un molde y de ahí sacamos cera, cuando sacamos la cera retocamos la figura, la cera se pone a quemar, se pierde y luego se vacía el bronce con muchos tubitos que le llamamos colada, y entonces se quita todo eso con cincel y martillo para retocarla, por último se mete una pátina y así termina el trabajo”, manifestó el escultor Álvaro Castaño Orozco.
Torreón, Ciudad En Equipo